Quienes usan lentes de contacto corren el riesgo de sufrir infecciones tales como la del ojo rojo (conjuntivitis), abrasiones corneales e irritación de los ojos. Una consecuencia común de una infección ocular son las úlceras corneales, las cuales son llagas abiertas en la capa exterior de la córnea. Incluso con estos riesgos, la Asociación Americana de Optometría estima que el 57 por ciento de los usuarios usan los lentes más tiempo de lo que deberían. Por lo tanto, la duración de tus lentes va a depender del tipo de lentes y la evaluación que haya realizado el oftalmólogo sobre la tolerancia de tus ojos al uso de las lentillas.
Muchos lectores se sentirán identificados al rememorar, leyendo el post, alguna de las “temeridades que en algún momento hicieron con sus lentillas. El rechazo a cambiar los lentes de manera oportuna, dormir con ellos, e incluso no cambiar el estuche donde los guardas puede provocarte una infección seria. Estos microbios proliferan en el entorno cálido y húmedo que hay bajo sus lentes de contacto, especialmente cuando cierra los párpados durante la noche. Aunque a mucha gente podría parecerle que no es gran cosa, nadar o ducharse con sus lentes de contacto es una muy mala idea.
Las infecciones relacionadas con los lentes de contacto pueden ir de un caso molesto de conjuntivitis a una afección más grave, como la queratitis por Acanthamoeba, o las infecciones oculares fúngicas que pueden provocar una pérdida de visión permanente. Aunque llevar lentes de forma flexible no es tan cómodo como el uso prolongado (es necesario un cuidado adecuado del lente usando una solución para lentes de contacto autorizada cada vez que se los quita), puede ser menos arriesgado que el uso prolongado. A lo largo del tiempo se han creado muchos tipos de lente de contacto, siempre buscando mayor comodidad y confort. Para reducir más los riesgos de llevar lentes de contacto de forma continua, muchos oculistas recomiendan llevar los lentes de contacto de uso prolongado de forma flexible (en vez de llevarlos durante varios días sin descanso).
Si lleva lentes de contacto de forma continua durante varios días, el riesgo de que sufra estos problemas aumenta significativamente. Para muchas personas, otra alternativa viable a los lentes de contacto de uso prolongado es elegir LASIK o algún otro tipo de cirugía ocular refractiva para eliminar a la vez la necesidad de gafas de prescripción y lentes de contacto. Si los desechas después de usarlos una vez, puedes prevenir que se forme esta acumulación y reducir el riesgo de infección. Partiendo de la base de que hay millones de usuarios de lentes de contacto en el mundo y muchos miles en nuestro país, me he dicho que podía ser interesante escribir un post, relatando los cinco errores más comunes que estos usuarios cometen, o han cometido en algún momento, al utilizar sus lentillas.
Según una investigación publicada en The Journal of Optometry, una de las principales causas de la queratitis microbiana es dormir con lentes de contacto. Algunas personas no pueden tolerar llevar lentes de contacto de uso prolongado durante este tiempo, y los ojos de algunas personas no pueden tolerar en absoluto llevar lentes de contacto por la noche.