Por lo general, puede guardar de manera segura los lentes de contacto en la solución desinfectante multiusos fresca, en un estuche para lentes de contacto bien cerrado, por hasta 30 días. Antes de ponerse los lentes de contacto en los ojos, límpielos y desinféctelos con solución para lentes de contacto fresca. Solo las lentillas que lo especifican lo permiten, e incluso así, esto solo se permite bajo la asesoría de su óptico u oftalmólogo. Aunque es posible que las consecuencias de usar lentillas levemente expiradas no afectan de inmediato, es importante tener en cuenta que puede estar causando más daños a futuro.
No retirar las lentillas durante el sueño puede tener riesgos como el de infección ocular, le recomendamos llevar especial cuidado. Desafortunadamente, los depósitos comienzan a acumularse en las lentillas tan pronto como estas son retiradas de su envase estéril. Nunca debe guardar los lentes de contacto en agua (ya sea embotellada, destilada o de grifo), en una solución salina casera, en un spray nasal salino, en un colirio ni en ningún otro líquido no destinado a la desinfección y almacenamiento de lentes. No obstante, si no va a ponerse estos lentes durante un periodo prolongado, los lentes de contacto permeables al gas se pueden guardar de forma segura en un estuche seco durante meses o más tiempo.
La única forma de asegurarnos que nuestra lentilla es la correcta y que va a seguir siéndolo los próximos meses es acudiendo a nuestra óptica y preguntando a nuestro contactólogo. Muchos usuarios de lentillas ignoran la recomendación, de que no deben usar lentillas por más tiempo del periodo prescrito, ya sea intencional o accidentalmente. Aunque los materiales empleados en la fabricación de las lentillas cada vez son mejores, el uso de lentes de contacto limita el acceso de la córnea tanto a la lubricación de la lágrima como al necesario oxígeno. Las lentillas uso diario, quincenales y mensuales no están diseñadas para durar más de lo especificado.
Existen algunas lentillas con las que es posible dormir, pero debe estar especificado en los parámetros de las mismas y, además, debe ser aprobado por el óptico u especialista de la visión. Con el tiempo, la solución para lentes de contacto puede perder su eficacia y los gérmenes pueden entrar o crecer en el estuche. Pero si usas lentes de hidrogel, lo más probable es que tus ojos estén enrojecidos y ardiendo cuando despiertes, e incluso corres el riesgo de que la córnea resulte dañada. No hace falta decir que la mayoría de los folletos de instrucciones para usuarios de lentes de contacto también advierten contra el uso de saliva para el almacenamiento de sus lentes.
